El Castillo Wulff en Viña del Mar es una reconocida edificación gracias a su apariencia y estilo arquitectónico inspirado en la mansión de Liechtenstein, en Alemania. La estructura cuenta con características de diseño alemán y francés, además de rasgos medievales, cualidades que resultan llamativas tanto para la población nacional, como para los miles de turistas que la visitan.
Su construcción se realizó entre 1905 y 1906 por parte del filántropo Gustavo Adolfo Wülff Mowle. Es una de las pocas edificaciones que consiguió el permiso de construcción en la orilla de mar, específicamente entre las rocas de Caleta Abarca y el Estero Marga-Marga. El arquitecto Alberto Cruz Montt, participó de su remodelación posterior en 1910.
Como análisis arquitectónico, la edificación fue construida con materialidad de madera, sin embargo, esta cambió a piedra. Se configuró con tres torres y terrazas, pero sufrió cambios a lo largo del tiempo, como la incorporación de un torreón principal y un puente conector con la vivienda. Tras la muerte de Wulff, la propiedad cambió de dueño, quien realizó nuevas reformas como la eliminación de dos torres y la ampliación del acceso. Hoy en día el edificio pertenece a la Municipalidad y ha tenido funciones de museo y características turísticas e históricas que han perdurado en su existencia.
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¿Cómo la arquitectura moderna se concretó en Viña del Mar, Chile?En base a la relevancia que tomó como centro turístico e ícono de la ciudad, fue nombrado monumento histórico el año 1995, razón por la que su preservación y mantención llamaron la atención de entidades gubernamentales chilenas, como la Municipalidad de Viña del Mar. Ahora, una nueva licitación pública para un nuevo proyecto de restauración entra en curso, embarcando el análisis del estado de la edificación, la definición de las medidas de intervención y los métodos, y el posterior plan de mantenimiento.
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